Historia

>>> Historia

Ya desde 1814, fecha en la cual se establece la Casa de Enseñanza de Santo Tomás, los costarricenses mostraban su interés por la educación. Podría decirse que con la fundación de esta efímera institución se marca el inicio de una lenta pero permanente organización de la educación pública nacional. Las artes plásticas empiezan a germinar dentro de la cultura costarricense.


>>> Fundación de la Escuela Nacional de Bellas Artes

Dicho proceso se materializa en 1897 con la creación de la Escuela Nacional de Bellas Artes y con la inauguración del Teatro Nacional, cuyo propósito primordial es la difusión de las artes.
El Presidente de la República, don Rafael Yglesias Castro, esperaba la llegada al país del pintor español Tomás Povedano de Arcos (1857-1943), a quien se le asigna la organización de la nueva institución. Povedano era un hombre de gran experiencia docente quien se había encargado anteriormente de la fundación de dos escuelas de arte en Cuenca y Guayaquil, Ecuador.

Don Tomás Povedano será el fundador de la Escuela Nacional de Bellas Artes, también su primer director, el defensor de la existencia de la institución en todos los momentos de crisis y maestro de algunos jóvenes que continuarán con su obra.

El método de enseñanza que establece la Escuela Nacional de Bellas Artes se enmarca dentro de la mejor tradición académica. Para iniciar las labores de enseñanza, se encarga un conjunto de yesos y láminas, algunas de las cuales aun se conservan en los pasillos del actual edificio de la Escuela de Artes Plásticas
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Además de los cursos regulares, se imparten otros para artesanos de la construcción con el fin mejorar sus conocimientos. Así mismo, es en esta institución donde se forman los futuros profesores de arte quienes contribuirán en la instrucción de los jóvenes costarricenses en las escuelas y colegios.


>>> Facultad de Bellas Artes

En 1940, se crea la Universidad de Costa Rica y en su seno la Facultad de Bellas Artes. "La Academia" nombre con que se conoce a la antigua Escuela Nacional de Bellas Artes por continuar el estilo académico europeo, asegura su existencia al unirse a la naciente institución de educación superior.

La pintora y pianista Ángela Castro Quesada (1884-1954) será la primera decana de la Facultad de Bellas Artes de la Universidad de Costa Rica durante el período de 1940 a 1942. Castro se interesa en introducir algunos cambios en los planes de estudio. Al retirarse se designa al arquitecto y pintor Teodorico Quirós Alvarado (1897-1977) para el puesto. Este se aboca a una transformación profunda de los planes de estudio de la Facultad. El objetivo de los nuevos programas es poner a los estudiantes en contacto con su realidad social, darle nuevos instrumentos técnicos con que expresarse e introducirlos en el conocimiento de las corrientes artísticas más recientes y contemporáneas.

Con esta intención se introduce el curso obligatorio de pintura al aire libre; para las clases de dibujo, pintura y escultura se contratan modelos; además, se introducen cursos de historia del arte para que los jóvenes puedan enterarse de los cambios en los estilos artísticos que se han dado a través de la historia.

Al retirarse Teodorico Quirós le corresponde al arquitecto y pintor Francisco (Chisco) Salazar (1892-1968) asumir la Decanatura. Es él quien se hace cargo de consolidar las innovaciones y de cohesionar al grupo de jóvenes profesores. Este proceso se lleva a cabo de 1945 a 1948.

El 18 de mayo de 1948 es nombrado decano el escultor Juan Portuguéz Fucigna. Formado en Italia, es el primer escultor que asume este cargo y se mantendrá en este hasta el año de 1972. Una de las más importantes luchas que va a dar, es la de proveer a la Facultad de Bellas Artes de su propio edificio, lo que logra en 1968. No se conformó con que le aprobaran la construcción del edificio, sino que se esmeró en que también fuera de gran belleza, por eso es que aún hoy día sigue siendo uno de los más admirados del paisaje universitario.


>>> Escuela de Artes Plásticas

En 1972, don Juan Portuguéz abandona la decanatura, en medio de un proceso que transforma la institución en una Facultad de Bellas Artes compuesta por tres escuelas: la Escuela de Artes Plásticas, la Escuela de Artes Musicales que se incorpora en este momento a la Universidad de Costa Rica y la Escuela de Artes Dramáticas recién fundada.
La dirección de la nueva Escuela de Artes Plásticas recae en el pintor César Valverde Vega. Arranca su período de trabajo con una nueva reforma de sus planes de estudio. De ahora en adelante, además de pintura y escultura, se introdujo las carreras de Cerámica, Artes Gráficas e Historia del Arte.


Floria A. Barrionuevo Chen-Apuy
Licda. en Historia del Arte
Exdirectora de la Escuela de Artes Plásticas.


Extracto tomado de:
Catálogo del Centenario de La Escuela Nacional de Bellas Artes, Escuela de Artes Plásticas, 1897 – 1997. Museo de Arte Costarricense y Escuela de Artes Plásticas de la Universidad de Costa Rica. Programa Re-visión de un Siglo, volúmen 1

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